Coche del Año 2026: 36 candidatos, 8 chinos y un italiano que quiere dar la campanada

Coche del Año 2026: 36 candidatos, 8 chinos y un italiano que quiere dar la campanada
El coche del año 2025 fue el Renault 5 e-Tech, ¿quién mandará en 2026?

El jurado del Coche del Año en Europa ya tiene la preselección sobre la mesa. De los 36 modelos que siguen en la carrera, solo siete pasarán a la final. La lista de finalistas se anunciará el 31 de octubre. El ganador verá la luz el 9 de enero de 2026 en la inauguración del Salón del Automóvil de Bruselas. Id calentando la libreta, que habrá sorpresas.

Lo que más llama la atención

  • La cifra sube a 36 por un emparejamiento peculiar: Suzuki e‑Vitara y Toyota Urban Cruiser cuentan como uno por su gran similitud, especialmente en el interior.
  • El precedente existe. Renault 5 y Alpine A290 también se consideraron un único modelo y acabaron llevándose el galardón en 2025.
  • Audi y BYD son las más prolíficas con cuatro candidatos cada una.
  • China coloca ocho semifinalistas y confirma que ya no viene a mirar, viene a competir.
  • Stellantis suma ocho modelos en liza. Entre ellos está el Fiat Grande Panda, el único coche italiano de la lista. Italia discreta en número, no en ruido.

Qué pinta tiene esta edición

Hay de todo. Urbanos bien empaquetados, compactos que apuestan por la eficiencia, SUV grandes que siguen marcando territorio y una buena ración de eléctricos junto a híbridos e incluso propuestas térmicas puras. El menú es variado y el jurado lo agradecerá. La pelea real estará en el equilibrio entre tecnología útil, precio sensato y consumo contenido. El motor de moda ayuda, la factura a final de mes decide.

Los casos que marcan el debate

El dúo que hace 36

La lista debería quedarse en 35. Sin embargo, el Suzuki e‑Vitara y el Toyota Urban Cruiser comparten plataforma y soluciones hasta el punto de agruparse como un solo candidato. Ya pasó con Renault 5 y Alpine A290 y la jugada salió cara para el resto. Enseñanza sencilla. Las plataformas modulares permiten variedad de estilos sin alejarse del mismo corazón técnico.

El músculo chino y la réplica europea

China coloca ocho semifinalistas. BYD aparece con cuatro propuestas y no está para hacer turismo. Audi iguala ese número y defiende el terreno premium con argumentos sólidos. Stellantis aporta ocho modelos y se anota una nota emotiva con el Fiat Grande Panda. Un país, Italia, un representante. Poco volumen, mucho foco.

Modelos a vigilar

  • Fiat Grande Panda
    Urbano con espíritu práctico, estética con guiño nostálgico y sabor de coche listo para la ciudad. Si mantiene precios a raya y espacio inteligente, será el coche que se recomienda solo.
  • BYD Seal 6 DM i Touring
    Enfoque familiar de corte eficiente. La receta combina electrificación con autonomía generosa y maletero útil. Si la calidad percibida acompaña, cuidado con este break silencioso.
  • Renault 4 E Tech eléctrico
    Un icono que vuelve con traje de cero emisiones. La carta es clara. Carisma, diseño amable y uso pensado para el día a día. Si el consumo real acompaña, la simpatía puede convertirse en votos.

Qué valora el jurado

  • Innovación que se nota, no que se anuncia
  • Seguridad activa y pasiva con resultados medibles
  • Eficiencia y costes de uso con cabeza fría
  • Relación valor precio que no se pierde en el marketing
  • Cómo conduce, cómo frena y cómo vive el coche en el mundo real

No gana el que más pantallas monta. Gana el que mejor resuelve la vida del conductor.

Fechas clave

  • Preselección ya comunicada con 36 candidatos
  • Finalistas el 31 de octubre
  • Ganador el 9 de enero de 2026 en Bruselas

Qué significa para ti si vas a comprar

  • Si buscas urbano eficiente, habrá chollos bien pensados.
  • Si prefieres SUV compacto, vigila pesos y consumos. La etiqueta ayuda, el depósito duele.
  • En eléctricos, fíjate menos en la cifra de batería y más en lo que entrega en carretera. La buenas cargas valen más que los números redondos.

La lista está servida. Falta que la carretera hable y que el jurado afine el oído. ¿Quién se lleva tu voto imaginario?