Hyundai y su desfile de máquinas
Hyundai. Esa marca surcoreana que hace coches que muchas veces pasan desapercibidos, pero cuando pruebas alguno, te preguntas, ¿cómo no he escuchado más sobre ellos?
El incansable Hyundai i30
Hablemos del Hyundai i30. Un compacto que no se anda con chiquitas. Viene cargado de tecnología. En su última versión, ofrece un motor 1.5 T-GDI de 160 CV. Suficiente para disfrutar de la carretera. Lo probé hace unos meses y, oye, la sensación de control es increíble. El sistema de frenos no decepciona. De cero a cien en poco más de 8 segundos. Lo notas cuando el pie derecho se inquieta.
Hyundai Tucson, el SUV que mola
Pasando a SUVs, el Hyundai Tucson destaca. Es el amo de la selva urbana. Posee un diseño audaz. ¿Nombres raros? Lleva un motor híbrido 1.6 T-GDI disponible en versiones de 230 y 265 CV. Números que suenan bien, ¿eh? La versión híbrida enchufable, a tope, baja las emisiones como quien no quiere la cosa.
Kona, el pequeño gran campeón
El Hyundai Kona. Ese pequeño SUV que quiere ser grande. No le falta personalidad. Desde su versión eléctrica te ofrece hasta 484 km de autonomía. No está nada mal para recorrer carreteras sin preocuparte por el cargador. Motor de 204 CV, rápido y ligero. Si das un par de vueltas, te olvidarás de estar en un SUV. Se siente más como un compacto con muchas ganas de juerga.
Santa Fe, el veterano de la autopista
El Santa Fe, un veterano del asfalto. Lleva más de dos décadas demostrando. Con motores que van desde los 202 hasta los 265 CV. El espacio interior es como un mini salón. Ideal para familias que buscan comodidad. ¿Lo he dicho? Tiene asientos con calefacción. Para esos inviernos que te cortan el aliento.
Hyundai Ioniq 5, el alienígena
Llegó el Hyundai Ioniq 5, directo del futuro. Un eléctrico que parece de otro mundo. Diseño retrofuturista que no pasa desapercibido. Entre 170 y 306 CV de potencia. Tracción trasera o total, tú eliges cómo manejar el spacemóbil. Carga ultrarrápida: 18 minutos te da el 80% de batería. Ideal para los que no pueden esperar ni un segundo más.
Lo que me gusta...
No todo es oro, ¿verdad? Los interiores a veces parecen una feria de botones. Pero es un pequeño precio a pagar. Hyundai sabe lo que hace. Su conectividad es guay. Android Auto y Apple CarPlay siempre a tiro. Y los sistemas de seguridad... Abundantes. Da gusto saber que alguien se preocupa porque no acabes en un árbol cuando te despistas.
El control de carril, una joyita. Aunque te pongas en plan piloto automático, no pierde el norte. Incluso incorporaron asistente de conducción en autopista. Lo probé en el i30 y me sentía como un rey. Sin estrés.
En los tiempos que corren, Hyundai tiene mucho que decir. Desde coches eléctricos hasta SUVs para comerse la ciudad. Vale la pena probarlos. ¡Anímate y cuenta tu experiencia! ¡Nos vemos en el asfalto!