Nueva vida a los 4 aros
Audi, señoras y señores. Una marca que ha sabido mantenerse a la vanguardia. Se reinventa como el Barça con nuevo entrenador. Pero aquí hablamos de motores, no balones. ¿Te gusta el lujo con un toque de deportividad? Audi es tu marca.
Audi A3, el eterno favorito
El Audi A3. Un clásico moderno. Viene con tres letras: T, F, S, I. Tres letras que significan gasolina directa al corazón. Su motor 1.5 TFSI varia entre 150 y 200 CV. Ahorrar energía como un móvil en modo avión. Y si te gusta el diésel, está el 2.0 TDI. Te da de 116 a 200 CV, dependiendo de cuánto te ponga la velocidad.
Mi experiencia con el A3
Lo conduzco desde hace dos años. Es ágil como un lince. Filtra los baches de las calles como si nada. La dirección, precisa. Sensación de ir sobre railes. Lo recomiendo para la jungla urbana.
Q5, el SUV que te hace sentir todopoderoso
El Q5. O el SUV que puedes llevar a la nieve. Por si te gusta más la montaña que la ciudad. Audi ha hecho magia con sus motores. Tienes el 2.0 TFSI, una joya de 265 CV. Como un reloj suizo. O el diésel 2.0 TDI con 163 CV. Y viene con cuatro. Cuatro ruedas motrices, ¡claro! La tecnología quattro para tus aventuras.
RS, pura adrenalina
Y si estás buscando pura adrenalina, ve por un RS. Audi RS3, ese bicho. Motor turbo de 5 cilindros. Rebosa potencia con 400 CV. Como una botella de cava bien agitada. Es fácil de enamorarse de su ronquido. Pero cuidado, puede ser amor peligroso.
A6, por si te va el ejecutivo
El Audi A6 es para los que prefieren el toque ejecutivo. No necesitas ser un político para llevarlo. Motores desde los 204 CV hasta los 367 CV, cortesía del 55 TFSI. Espacio para las piernas, como si fueras en business. Detalles tecnológicos a lo James Bond. Matrix LED, MMI touch response, toda la pesca. Fácil de aparcar, aunque siempre hay quien se queja.
Eléctricos, porque el futuro ya llegó
Por si vives en el futuro, Audi tiene el e-tron. Lejos de ser el R2-D2 de la carretera. Es avanzado pero palpable. El Audi e-tron es eléctrico puro, hasta 408 CV. Autonomía de hasta 436 km. Lo de “pura electricidad” no es solo marketing. Es real.
Ojo con los precios
No todo es felicidad y gasolina. Audi no es precisamente barato, avisado quedas. Aunque valen cada euro, como tu suscripción a Netflix. Claro, si te gusta su diseño y tecnología. Pero cuidadito, que luego no puedas ni pagar las cañas.
Audi: una marca que rompe moldes
Así que ahí lo tienes. Audi sigue haciéndolo como pocos. Si te gusta sentir el asfalto, estos coches son para ti. ¿Tienes algún modelo favorito? Ve a probarlos. No me hagas caso solo a mí. Pero cuidado, que te podrías enganchar.