¿Se atreve Fiat con su primer SUV coupé y llegará con el estilo del Grande Panda?

¿Se atreve Fiat con su primer SUV coupé y llegará con el estilo del Grande Panda?
¿Fiat Grande Panda coupé? Habrá que verlo

Fiat lleva tiempo calentando el segmento SUV. Primero con el 500X, luego con el 600, y ahora apunta a una pieza que le faltaba en el puzzle. Las últimas fotos de prototipos lo dejan entrever. El próximo lanzamiento de la marca italiana adoptaría una silueta inédita para ellos, con una caída de techo propia de un coupé. Y la fecha que suena para ver su imagen definitiva es 2026. Sí, la familia crece y con un perfil más atrevido.

La pista más evidente llega del diseño que están probando en carretera. Las mulas lucen rasgos que recuerdan al actual Grande Panda, un coche que ha marcado una nueva línea estética en Fiat con volúmenes limpios, faros de firma muy reconocible y una actitud robusta. Trasladado a un SUV, ese lenguaje encaja de maravilla con pasos de rueda cuadrados, cintura alta y un techo que se descuelga de forma suave hacia el portón. No es un Panda con tacones, es otra cosa.

¿Por qué ahora un SUV coupé en Fiat?

Porque el mercado ha encontrado en esta mezcla de altura y silueta deportiva un filón. Menos aspecto de ladrillo, más aerodinámica y una postura de conducción que sigue siendo elevada. Para una marca como Fiat, que siempre ha sabido leer bien la calle, es un paso lógico. Además, pone una pica en un nicho que hasta ahora no tenía sello de Turín.

La gran pregunta es dónde encajará. Con 500X y 600 ya en juego, todo apunta a un modelo que se sitúe entre ambos o que directamente plante una alternativa más emocional. Un SUV de tamaño contenido, con la practicidad que se espera para el día a día, pero con un plus de estilo. Es la jugada habitual en este tipo de carrocerías. Pierdes un poco de altura en las plazas traseras, ganas presencia y, de paso, mejoras el flujo del aire a alta velocidad.

En lo técnico conviene ser prudentes. No hay datos oficiales, aunque el parentesco estético con el Grande Panda invita a pensar en una estrecha relación dentro de Stellantis. Eso puede traducirse en una oferta mecánica variada. El Grande Panda ya ha mostrado una opción gasolina 1.2 Turbo de 100 CV y también orientaciones claras hacia la electrificación. Sería lógico que el futuro SUV coupé combinara alternativas de combustión eficientes con versiones electrificadas, todo con consumos y costes razonables. Palabra clave para Fiat. Y para tu bolsillo.

Otra clave será el interior

Fiat está apostando por cabinas funcionales, materiales sencillos bien resueltos y esa pizca de simpatía que evita que todo parezca sacado de una oficina. En un SUV de silueta coupé el reto está en conservar buen acceso atrás y un maletero práctico. Veremos soluciones de asientos traseros bien perfilados y un suelo de carga útil. La modularidad manda y aquí Fiat suele moverse con soltura.

El calendario encaja con lo que se ve en las carreteras de prueba. Los prototipos circulan con camuflaje, señal de que el diseño ya está bastante cocinado y ahora toca afinar ajustes de chasis, calibración de motores y sistemas de ayuda. Si todo va según guion, 2026 se perfila como buen momento para quitar la lona. Antes deberíamos ver más mulas, quizá alguna unidad de preserie con menos camuflaje, y filtraciones de interiores. Nada nuevo bajo el sol de este sector.

¿Qué aporta a la gama? Un mensaje claro

Fiat no solo quiere coches sensatos, también quiere coches que entren por los ojos. Un SUV coupé es una declaración estética que, si viene acompañada de precios competitivos y una gama mecánica coherente, puede convertirse en una de esas compras que haces con la cabeza y presumes con el corazón. Esa es la fórmula.

Tampoco perdería de vista la conectividad y las asistencias. El cliente que se fija en una carrocería de corte deportivo también espera un sistema multimedia ágil, actualizaciones fáciles y ayudas a la conducción que no se interpongan entre el volante y las sensaciones. Interfaz clara, mandos que no requieran un curso de posgrado y la posibilidad de elegir entre una experiencia más clásica o más digital. Equilibrio, que se llama.

Fiat prepara algo que no tenía. Un SUV con alma coupé y acento Grande Panda. Encaja con la evolución de su catálogo, llega para animar la parte más emocional de la oferta y, si las fotos espía no engañan, lo hará con un diseño de esos que te hace girar el cuello en la calle. Todo apunta a 2026 para la presentación. Hasta entonces, paciencia y mirada atenta. La carretera ya está dando pistas. Y a Fiat, cuando se pone juguetona, le suelen salir coches con mucho tirón.