¿Puede este 4x4 eléctrico chino de 1.850 Nm poner en apuros al Land Cruiser?

¿Puede este 4x4 eléctrico chino de 1.850 Nm poner en apuros al Land Cruiser?
Hongqi quiere apretar a Land Cruiser con un nuevo 4x4

Hongqi quiere meterse en territorio sagrado. Su nuevo todoterreno eléctrico, mostrado por primera vez en el Salón de Shanghai 2025, apunta claramente a iconos como el Toyota Land Cruiser y el Land Rover Defender. Lo enseñaron como prototipo en primavera y la versión definitiva verá la luz en noviembre durante el Salón del Automóvil de Guangzhou. Llegará al mercado en 2026 y, detalle simpático, aún no tiene nombre. La marca lo está eligiendo con un concurso que ha movilizado a cientos de miles de entusiastas. Señal de que este 4x4 ha despertado la curiosidad.

La estrategia del nombre tiene su miga. Hongqi ha preseleccionado diez opciones y mantiene abierta la votación en China entre el 8 y el 31 de octubre. Buscan una denominación contundente que huela a polvo, roca y aventura. Más allá del marketing, es un gesto interesante para una marca que quiere credibilidad en el mundo off road. Poner a la comunidad a participar ayuda a construir relato. Si luego el coche cumple, medio camino hecho.

Por fuera no hay timidez. Líneas muy rectas, volumen bien cuadrado y una presencia que grita campo desde lejos. Pasos de rueda generosos, protecciones perimetrales y la rueda de repuesto colgada en el portón que nos devuelve a los clásicos todoterreno de escalera y bloqueos. La inspiración visual recuerda a los Land Cruiser más aventureros y al Defender moderno, con ese toque de herramienta funcional que tanto seduce a los puristas. Saldrá con neumáticos todoterreno de serie, una declaración de intenciones para no quedarse en asfalto y bordillo del cole.

Encima del techo asoma un módulo de LiDAR, un detalle poco habitual en un 4x4 clásico y cada vez más presente en los eléctricos de última hornada. Esto sugiere funciones avanzadas de asistencia a la conducción e incluso capacidades de navegación en entornos complejos. No hablamos de que el coche haga la ruta por ti, pero sí de ayudas que suman seguridad cuando el terreno se complica. Un LiDAR bien integrado puede leer orografía y obstáculos con precisión, útil tanto en carretera como en pistas.

La técnica es donde este Hongqi quiere marcar diferencias. Monta cuatro motores eléctricos, uno por rueda, y anuncia un par combinado de hasta 1.850 Nm. La cifra impresiona y, bien gestionada, puede traducirse en tracción casi inagotable. La potencia exacta no está confirmada, aunque las estimaciones la sitúan cerca de los 1.000 CV. Con semejante arsenal promete un cero a cien por debajo de cuatro segundos. Un 0 a 100 así es casi anécdota en un 4x4, pero dice mucho de la reserva de empuje disponible para sortear pendientes, bancos de arena o arrastrar remolques.

Lo interesante es cómo canaliza ese músculo. Hongqi habla de hasta tres diferenciales con bloqueo y de un ordenador central que reparte el par con precisión entre las ruedas. La combinación de bloqueos y vectorización eléctrica es una receta muy potente. Donde un sistema puramente mecánico reacciona, el control electrónico se anticipa. Frente a una piedra húmeda, una zanja o una diagonal comprometida, poder enviar par de forma instantánea a la rueda con más adherencia marca la diferencia. Si se confirma una calibración fina, puede convertirlo en un escalador muy serio.

No todo es potencia. Un todoterreno eléctrico se enfrenta a retos propios, y aquí está el examen de verdad. El peso de la batería condiciona apoyos y inercias, exige una suspensión a la altura y demanda una protección inferior generosa para evitar sustos en pasos de roca. La autonomía en rutas largas y lentas, con neumáticos de tacos y poca velocidad media, también es un punto sensible. La buena noticia es que la entrega de par y la dosificación de un eléctrico son perfectas para trialeras. La mala es que sin una gestión térmica y energética fina se puede resentir el alcance. Ese ordenador central y los bloqueos pueden ayudar a avanzar con menos pérdidas y patinajes, que es donde se va la energía cuando el terreno muerde.

Quedan incógnitas relevantes. No hay datos oficiales sobre la capacidad de la batería, el sistema de carga, la arquitectura eléctrica ni parámetros clave como profundidad de vadeo, ángulos de ataque y salida o capacidad de arrastre. Tampoco asoma todavía la cifra de peso en orden de marcha, que será determinante. Son números que decidirán si este Hongqi se queda en un espectáculo de salón o si realmente puede convivir con la dureza del uso expedicionario.

La comparación con el Land Cruiser no se gana en una ficha técnica. Toyota juega en casa cuando se habla de fiabilidad, durabilidad y una red de servicio que llega donde no llega el mapa. Hongqi, si quiere poner en apuros a ese mito, tendrá que demostrar robustez en condiciones reales, ofrecer recambios sin drama y tener una estrategia clara para el uso fuera de carretera con carga rápida disponible en rutas menos trilladas. No basta con enseñar bíceps, hay que levantar el saco día sí día también.

Lo que sí parece es que Hongqi ha entendido el lenguaje del 4x4. Forma de ladrillo bien hecha, soluciones funcionales, rueda detrás, neumático adecuado y una base eléctrica con mucho sentido para el control de tracción. Si en Guangzhou confirman un paquete coherente y en 2026 llega a los concesionarios con un precio competitivo, estaremos ante un candidato real a agitar el segmento. Y entonces la pregunta dejará de ser si puede plantar cara al Land Cruiser para convertirse en cuánto tardará en que lo tomen en serio más allá de China.