Precios del Mitsubishi Eclipse Cross eléctrico con 600 km de autonomía

Precios del Mitsubishi Eclipse Cross eléctrico con 600 km de autonomía
Mitsubishi ha sabido dar un golpe sobre la mesa

Mitsubishi ha decidido dejar de jugar al escondite y ha sacado su carta más fuerte al presentar el nuevo Eclipse Cross 100% eléctrico en Europa. Pero lo más jugoso no es solo el salto tecnológico, sino el precio: cuesta 2.000 euros menos que el mismísimo Renault Scénic, su hermano francés de plataforma y planta de montaje. ¿El resultado? Un SUV eléctrico con sabor japonés y alma francesa que llega dispuesto a sacudir el segmento compacto. Si pensabas que la rivalidad entre marcas solo era cuestión de diseño, prepárate para quedarte picueto.

El Eclipse Cross eléctrico: gemelos casi idénticos, pero con distinto acento

Vamos al grano: la segunda generación del Mitsubishi Eclipse Cross llega completamente eléctrica, dejando atrás las medias tintas del híbrido enchufable. Y lo hace aprovechando la receta francesa del Renault Scénic, con quien comparte absolutamente todo bajo la piel —excepto algunos retoques estéticos—. Mismo chasis, misma mecánica, mismos genes, pero cada uno con su carácter.

Por fuera, Mitsubishi pone su sello en la firma lumínica, los paragolpes, la calandra y ese pilar C rematado con molduras propias. Esos detalles son los que marcan la diferencia cuando intentas identificar cuál es cuál en un aparcamiento del hipermercado. Pero ojo, porque bajo esa carrocería hay una mecánica calcada: motor delantero de 220 CV (160 kW), tracción delantera y una batería de 87 kWh (NCM: níquel, cobalto y manganeso) capaz de homologar más de 600 km de autonomía según ciclo WLTP.

¿Te parece poco? También presume de recarga rápida: admite hasta 22 kW en corriente alterna y 150 kW en continua. Vamos, que en una parada para café puedes recuperar una buena tanda de kilómetros antes de que te sirvan el croissant.

Más barato que el Renault Scénic: la batalla del precio

Y aquí viene el giro argumental digno de serie premium: Mitsubishi ha decidido lanzar el Eclipse Cross eléctrico en Francia con un precio 2.000 euros por debajo del Renault Scénic. Sí, has leído bien. Dos mil eurazos menos por exactamente el mismo coche (salvo por las diferencias visuales). ¿Por qué? Porque a veces ser el hermano menor tiene ventajas inesperadas.

La jugada es redonda para quienes buscan maximizar ahorro sin renunciar a prestaciones ni autonomía. Mientras Renault sigue fiel a su estrategia de precios premium, Mitsubishi se cuela en el mercado con una etiqueta más atractiva y lista para conquistar a los compradores pragmáticos… y a los que no quieren pagar de más solo por un logotipo.

¿Dónde queda la personalidad japonesa?

Aunque ambos comparten hasta el último tornillo, Mitsubishi ha sabido diferenciarse lo justo para mantener su identidad. Más allá de la parrilla y los detalles cromados, el Eclipse Cross mantiene ese aire robusto que tanto gusta entre quienes buscan algo diferente a la sobriedad francesa. Y sí, podrás fardar en la oficina diciendo que conduces un japonés fabricado en Francia. Cosmopolita total.

No obstante, la verdadera personalidad aquí está en el enfoque: mientras Renault vende imagen y tradición, Mitsubishi apuesta por la relación calidad-precio como principal argumento de venta. Y visto lo visto, no les va nada mal.

Tecnología compartida y promesas para el futuro

Lo mejor es que esta plataforma compartida no se queda estancada en lo conocido. De entrada, el Eclipse Cross aterriza con una sola versión: motor de 220 CV y batería de 87 kWh. Pero en 2026 llegará un segundo pack más pequeño de 60 kWh, pensado para quienes priorizan precio sobre autonomía (y tienen un enchufe cerca de casa).

Además, Renault ya ha anunciado que sus eléctricos estrenarán baterías LFP (litio-ferrofosfato) en breve, y todo apunta a que Mitsubishi hará exactamente lo mismo con su Eclipse Cross. Este tipo de baterías prometen más durabilidad y menor coste, aunque a cambio de sacrificar algo de densidad energética. Menos glamour técnico, pero más tranquilidad para tu bolsillo… y para tu paz mental.

Autonomía real para el día a día

Los 600 km WLTP no son una cifra cualquiera. Es suficiente para superar sin despeinarse los desplazamientos diarios, escapadas de fin de semana y hasta algún viaje largo improvisado. Eso sí, recuerda siempre que las cifras homologadas son amigas del laboratorio y enemigas del tráfico real: si eres de los que conduce con alegría o vives rodeado de cuestas, la autonomía puede resentirse un poco. Aun así, la cifra es francamente competitiva dentro del segmento.

¿Y la potencia? Con 220 CV bajo el pie derecho tienes garantizada una respuesta ágil tanto en ciudad como en autopista. No será un deportivo japonés de los noventa —olvida las fantasías tipo Fast & Furious— pero sí un familiar eléctrico con muy buenos modales.

¿Por qué elegir el Mitsubishi Eclipse Cross eléctrico?

La pregunta del millón: si ambos coches son tan parecidos, ¿por qué decantarse por el Eclipse Cross? La respuesta rápida es sencilla: cuesta menos. Pero hay más motivos en juego:

  • Precio más bajo: esos 2.000 euros pueden marcar la diferencia en tu presupuesto o permitirte añadir algún extra.
  • Misma tecnología: motor, batería y recarga idénticos al modelo francés.
  • Estética diferenciada: detalles exteriores e interiores exclusivos.
  • Promesas a futuro: versión con batería LFP más barata y opción de menor capacidad para quienes buscan ahorrar aún más.

En resumen, quien busque un SUV eléctrico completo, espacioso y práctico se topará en el Eclipse Cross con una opción tan inteligente como lógica.

Sin miedo a mirar al futuro

Mitsubishi ha sabido dar un golpe sobre la mesa justo cuando todos apostaban por el “más por más”, demostrando que el “más por menos” sigue teniendo mucho sentido. El Eclipse Cross eléctrico no solo llega con argumentos sólidos, sino que estrena batalla directa dentro del propio grupo gracias a su precio rompedor.

¿Y lo mejor? Aterrizará en las calles europeas a principios del próximo año. Así que si tienes pensado cambiarte al eléctrico y quieres aprovecharte de las guerras fratricidas franco-japonesas, apunta este nombre en tu lista. El eclipse puede ser japonés… pero su sombra se va a notar mucho en Europa.