Peugeot 308 2026, pillado el lavado de cara que quiere sacar los colores al Golf

Lo del Peugeot 308 es de peli de suspense. El compacto lleva en nuestros concesionarios desde 2021 y, la verdad, ya iba tocando un “refresh” antes de que nos dieran ganas de cambiar de canal cada vez que lo veíamos. Peugeot se ha cansado de ir de segundón frente al Golf y quiere armar ruido. Te cuento lo que se cuece, que tiene miga.
Camuflaje y cambios por un tubo, ¡Ojo al frontal!
Las fotos espía están servidas y el 308 va bien tapado, como cuando sales en chándal para que no te reconozca el vecino. Todo el camuflaje se lo lleva la parte delantera y trasera, y normal, porque ahí llegarán los cambios más potentes.
En el frontal habrá ópticas nuevas, así que olvídate del “cutre look” de siempre. La típica parrilla de Peugeot, esa más grande que el ego de algunos futbolistas, va a ser modificada. El paragolpes también recibirá su ración de cirugía estética, para ir más macarra, pero con clase. Por detrás, menos show, pero sí van a toquetear los pilotos traseros y, desde lejos, sabrás que eso no es el 308 de 2021.
Me imagino pasando por la M30 de noche con las nuevas luces. Si al Golf le hace sombra, ojo, prepárate para verlos picados uno al lado del otro en el carril izquierdo.









Fotos nuevo Peugeot 308 2026
Más tecnología y menos tonterías para el interior
No hay fotos del interior todavía, pero se sabe que Peugeot no va a racanear en pantallas. El puesto de conducción seguirá teniendo el cuadro digital (ya era hora de que copiaran algo a Audi) y la pantalla táctil será el epicentro de todo. Se quedará con ese rollo moderno, interfaz que no sabes si estás en un coche o en una tablet gigante. Para los que no lo habéis probado, aviso: el i-Cockpit de Peugeot es… raro al principio, pero luego engancha.
Si meten el nuevo sistema multimedia que montan en los 208 mejorados, será bastante rápido y compatible con Apple CarPlay y Android Auto sin cable.
Motores gasolina, híbridos y la pataleta del diésel
El chasis no va a cambiar mucho, porque la plataforma EMP2 sigue dando guerra. Lo interesante viene debajo del capó. Peugeot sabe que España todavía va con varios ritmos: los de la gasolina, los del diésel “old school” y los que apuntan a lo eléctrico aunque sigan mirando con recelo.
- Motores gasolina: mantienen el PureTech 1.2 tres cilindros. Cambios sobre todo en eficiencia y bajas emisiones. Ya lleva rato vendiéndose con opción MHEV, con hibridación ligera (48V), mucho ojo con esto si quieres etiqueta ECO.
- Microhíbrido: El último 308 ya montaba esta tecnología. El bloque PureTech 1.2 con 136 CV y cambio automático de doble embrague e-DCS6 va bastante fino para ciudad y extrarradio de Madrid o Barcelona. El par no es brutal, pero responde mejor que el típico atmosférico.
- Híbrido enchufable: Aquí meten el Hybrid 180 y 225. Motor gasolina Puretech 1.6 con la ayuda de uno eléctrico. Podrás hacer tus trayectos al trabajo en eléctrico puro (unos 60 km reales en muchos casos). Etiqueta CERO, de las que molan para sortear restricciones. He probado la versión de 225 CV y, siendo sincero, cuando tiras solo con batería en ciudad es suavidad total. Eso sí, en autovía con la batería baja, el consumo se dispara un poco porque el coche pesa más de lo que parece.
- El E-308: La variante 100% eléctrica va a seguir en el catálogo. Esta movida monta motor de 156 CV. Ideal para los que viven en ciudades grandes y pillar cargadores públicos no sea una odisea. Autonomía WLTP por encima de 400 km, en uso real depende mucho, pero mete 300 fácil si no eres de pie derecho pesado.
- El diésel 1.5 BlueHDi de 130 CV está en la cuerda floja. Hay rumores de que igual lo quitan, porque Peugeot y otras marcas ya tienen bastante manía a los motores de gasoil. Pero como el segmento C aún tiene fans diésel en España, lo mismo lo aguantan hasta el último suspiro.
Versiones Hatchback, SW y más allá
El 308 2026 pillado con camuflaje es el Hatchback, el de cinco puertas de toda la vida. También actualizan la versión SW (el familiar), que aquí en España tiene su público entre los que pasan de los SUV y quieren maletero gigante para cargar hasta el portátil del curro, la bici del niño y el perro.
En el anterior 308, el SW tiene 608 litros de maletero, y el hatch se queda en 412 litros. Para el restyling no prometen más espacio, pero Peugeot suele sorprender y a veces esconde algún hueco extra por ahí.
El lanzamiento está cerca, pero tampoco corras al concesionario mañana
Peugeot quiere presentar lo gordo antes de fin de año, pero los primeros que te vas a cruzar serán para 2026, seguramente después del Salón de Múnich de septiembre de 2025. Lo típico: primero las versiones molonas, luego las más básicas y, si hay suerte, alguna edición especial para España (que siempre nos cuelan alguna con detalles medio cutres pero chulos).
Experiencia personal: El 308, ni tan “soso” ni tan de abuelo
He conducido varias veces el 308 actual, tanto en versión diésel como híbrida enchufable. El tacto de la dirección es de los más directos entre los compactos, y se siente bastante ágil para ciudad. Para los de talla grande, el puesto de conducción peculiar obliga a regular el volante más bajo de lo normal por el tema del cuadro. No es problema, pero hay que pillarle el truco. En curvas, el 308 va menos blando de lo que esperas: menos balanceo que en un León, por ejemplo, y más silencioso en autopista.
En autovía con el PureTech 130, consumo real por autovía a 120-125 km/h ronda los 6 litros, que no está mal. El híbrido enchufable puede medirse con coches premium en suavidad, salvo cuando exprimes a fondo la potencia y notas el peso extra.
Bonus track, si buscas etiqueta ECO barata, ándate listo
Si vives en Madrid o Barcelona y el tema de pegatinas te preocupa, apunta a los PureTech microhíbridos. No gastan mucho y podrás esquivar la mayoría de restricciones. Eso sí, precios todavía altos para lo que ofrece frente a un León o un Megane. Pero diseño, acabados y postura “guay” en semáforos, el 308 siempre puntúa bien.