Mercedes VLE: el nuevo eléctrico fabricado en Vitoria que romperá esquemas en 2026

¿Quién dijo que las furgonetas son aburridas? Mercedes está a punto de darle la vuelta a este concepto con el esperado Mercedes VLE, el modelo que se fabricará en la planta de Vitoria a partir de 2026 y que promete redefinir lo que entendemos por “vehículo comercial”. Agarraos, porque este no es un lanzamiento más: es el salto definitivo de la estrella alemana hacia la electrificación total de su gama de grandes polivalentes.
De Clase V a VLE: cambio de nombre, cambio de era
El primer gran titular: adiós al clásico “Clase V”, hola “VLE”. Puede que para algunos esto suene solo a cambio de letras, pero detrás hay muchísimo más. El nuevo nombre ya deja bien claro el mensaje: VLE es sinónimo de electrificación total, al menos en su lanzamiento. Y si eres de los que piensa “pues vaya, otra eléctrica más”, te equivocas. Aquí Mercedes ha decidido tirar la casa por la ventana.
La fábrica de Vitoria —toda una veterana en esto de sacar joyas sobre ruedas— ya ha terminado las unidades de preserie. ¿Qué significa esto? Que el modelo está listo para pasar a producción real y, si nada se tuerce, lo veremos rodando por carreteras y ciudades en 2026. Spoiler: llega justo cuando el segmento necesita una revolución.
Un diseño que se sale del molde
Si por algo destaca Mercedes últimamente es por su valentía al diseñar coches que se reconocen desde el otro lado de la calle. Basta con echar un vistazo a los recientes CLA o GLC eléctrico para entender por dónde van los tiros. El VLE no será menos: líneas limpias, proporciones robustas y esa parrilla frontal que hará girar cabezas hasta en los parkings más anodinos.
Las primeras imágenes dejan claro que Mercedes quiere que la VLE sea algo más que una furgoneta. Aquí hablamos de presencia, tecnología y, sobre todo, mucha personalidad. Piensa en un salón rodante con aires futuristas y tendrás la idea.
100% eléctrica… ¿y algo más?
El anuncio del nuevo nombre deja pocas dudas: el Mercedes VLE nacerá como vehículo completamente eléctrico. Esto encaja con la estrategia global del fabricante, decidido a electrificar toda su flota paso a paso y sin complejos. La autonomía todavía es un misterio guardado bajo llave, pero ya sabemos cómo se las gasta Mercedes con sus baterías: si el EQV actual ronda los 400 kilómetros reales, cabe esperar una mejora notable en este nuevo modelo.
Ahora bien, aquí llega la sorpresa: aunque la VLE debutará como eléctrica pura, Mercedes no descarta añadir versiones híbridas o incluso motores alternativos más adelante. Es decir, no será un “solo eléctrico” para siempre, sino una plataforma flexible pensada para adaptarse al mercado y a los gustos del consumidor europeo. Algo así como un menú degustación para los amantes del confort alemán.
Tecnología premium en clave XXL
Si eres de los que piensa que una furgoneta es solo para cargar cosas o llevar pasajeros de A a B, prepárate para cambiar el chip. La VLE recogerá el guante tecnológico de sus hermanos de marca y lo subirá un par de puntos. Espera asistentes de conducción de última generación, conectividad total y esos acabados que hacen suspirar hasta al conductor más escéptico.
Por dentro, Mercedes promete un interior tan versátil como lujoso. Desde asientos giratorios hasta pantallas XXL y materiales premium pensados para resistir la vida diaria sin perder ni un ápice de elegancia. Ideal para familias numerosas, empresas de transporte VIP o simplemente para quien quiera viajar como un ministro sin renunciar a un enchufe.
Vitoria: la fábrica que pone a España en el mapa eléctrico
Que la fabricación tenga lugar en Vitoria no es casualidad. Esta planta es una de las joyas industriales de Mercedes-Benz en Europa y lleva años demostrando que aquí se hacen las cosas muy bien. El salto al eléctrico supone tanto un espaldarazo a la industria española como una oportunidad brutal para posicionarse en la nueva movilidad.
Nada menos que miles de empleos directos e indirectos dependen de este proyecto, y el hecho de convertir a Vitoria en epicentro de la electrificación europea es un motivo para sacar pecho. ¿Quién iba a decir hace unos años que una furgoneta “made in Spain” sería líder tecnológica en toda Europa? Pues así será.
Adiós rutinas, hola futuro sobre ruedas
La llegada del Mercedes VLE supone mucho más que un simple relevo generacional. Es un golpe sobre la mesa en un segmento donde muchos aún creen que la innovación es opcional. Ahora, con el lanzamiento previsto para 2026, la marca alemana nos invita a replantear cómo debe ser el transporte familiar y profesional del futuro.
¿El resumen? Adiós a los estereotipos: las furgonetas pueden ser eléctricas, lujosas y sí, también emocionantes. Solo queda esperar a verlas circular por nuestras calles… y decidir si pedirla con o sin asientos masajeadores.
La revolución eléctrica tiene fecha y lugar: 2026, Vitoria. Y esta vez viene con estrella (y mucha batería).