Mercedes CLA eléctrico con casi 800 km y carga ultrarrápida, el sedán que incomoda al Tesla Model 3

Nada de postureo SUV y sí una receta que mezcla eficiencia de récord, carga de 800 voltios y un interior premium que quiere poner contra las cuerdas al superventas americano. La estrella vuelve a brillar con argumentos propios.
En dos minutos, lo clave
- Casi 800 kilómetros de autonomía declarada con consumos muy bajos entre 12 y 14 kWh cada 100 kilómetros
- Arquitectura de 800 voltios con recargas exprés que añaden 300 kilómetros en unos 10 minutos
- Dos niveles de potencia, 272 CV y 354 CV
- Carrocería berlina de 4,7 metros y batalla de 2,79 metros con cinco plazas aprovechables
- MBUX de cuarta generación sobre MB.OS, actualizaciones remotas y head up display de gran formato
- Peso contenido para su clase cerca de los 2.000 kilos que ayuda a controlar inercias
Diseño de berlina y espacio real
El CLA eléctrico apuesta por una silueta baja y limpia, con centro de gravedad rebajado y proporciones de sedán moderno. Mide 4,7 metros de largo y su batalla de 2,79 metros ayuda a estirar el espacio interior. Detrás se viaja bien incluso si mides alrededor de 1,80. Cinco plazas reales, maletero aprovechable y una caída de techo que queda estética sin castigar la habitabilidad. Este es el formato que muchos echaban de menos entre tanto todocamino.
Propulsión y carga ultrarrápida
La gama arranca con 272 CV y culmina en una versión de 354 CV. La novedad que marca la diferencia es la red eléctrica a 800 voltios. Gracias a ella la potencia de carga sube de nivel y permite recuperar unos 300 kilómetros en apenas 10 minutos, siempre que el poste esté a la altura. Es el tipo de dato que cambia la percepción del coche eléctrico en viajes de verdad.
Autonomía y eficiencia
La marca anuncia casi 800 kilómetros de rango con un consumo realmente contenido. En conducción normal moverse entre 12 y 14 kWh a los 100 es factible, lo que explica esas distancias tan generosas entre paradas. Con esa eficiencia, el cálculo mental invita a pensar en una batería de gran capacidad neta. La clave no es solo el tamaño, también la aerodinámica de berlina y la gestión eléctrica afinada.
Tecnología y habitáculo
Puertas adentro manda la digitalización con un salpicadero muy bien integrado. Frente al conductor, un cuadro de 10,25 pulgadas. En el centro, otra pantalla de 14 que concentra el infoentretenimiento sobre MBUX de cuarta generación y MB.OS. Las actualizaciones se realizan de forma remota y sin pasar por taller. Para rematar, un head up display amplio que proyecta datos e indicaciones de navegación con nitidez. Silencio, suavidad y esa sensación de coche bien hecho que se espera de un Mercedes.
Dinámica y control de peso
La versión de 354 CV empuja con contundencia, pero el aplomo viene de otro sitio. Con un peso que se queda cerca de los 2.000 kilos para tratarse de un eléctrico, las inercias van más por la senda del control que del susto. Centro de gravedad bajo, reparto equilibrado y una puesta a punto que apuesta por la precisión antes que por el artificio. No hace falta tocar un botón para sentir que va sobre raíles.
Frente al Tesla Model 3
El objetivo está claro. El CLA eléctrico llega para disputar el trono de las berlinas a baterías más vendidas. Donde el Model 3 presume de software y eficiencia, este Mercedes responde con más calidad percibida, mejor aislamiento y un ecosistema tecnológico que ahora habla en fluido gracias a MB.OS. La arquitectura de 800 voltios y la recarga de infarto abren una brecha tangible. Y sí, aquí hay cuadro propio delante del conductor y un head up display de verdad, algo que muchos echarán de menos en el rival californiano.
Lo que apunta este CLA
Vuelve la berlina con argumentos sólidos. Autonomía larga, cargas ultrarrápidas y un interior que invita a sumar kilómetros. Si buscabas un eléctrico para viajar sin obsesionarte con la próxima parada, este Mercedes complica la elección. Y eso siempre es una buena noticia para el conductor que compara con lupa.