Mazda CX-5 2026, el SUV japonés que crece, presume de etiqueta Eco y planta cara a sus rivales

Mazda CX-5 2026, el SUV japonés que crece, presume de etiqueta Eco y planta cara a sus rivales
El CX-5 dice definitivamente adiós al diésel y también al cambio manual

¡Mazda vuelve a la carga! El nuevo CX-5 2026 ya está aquí, listo para conquistar el asfalto español y dejar claro por qué sigue siendo el niño mimado de la marca. Lo han afinado, pero sin hacer experimentos raros: la receta sigue funcionando, así que han preferido mejorarla en lugar de reinventarla. ¿El resultado? Un SUV que sigue siendo un CX-5 de pura cepa, pero con ganas de jugar en ligas mayores.

Más grande por fuera, gigante por dentro

Mazda ha decidido que es momento de crecer. El nuevo CX-5 estira su carrocería hasta los 4,69 metros, ganando más de once centímetros respecto a su antecesor. Esto lo pone al borde del segmento superior, y se nota: el espacio interior es ahora mucho más generoso y el maletero ofrece unos impresionantes 583 litros. Olvídate de peleas por las maletas en vacaciones.

Este extra de tamaño también le permite mirar por encima del hombro a rivales duros como el Citroën C5 Aircross, Hyundai Tucson, Kia Sportage, Peugeot 3008 o incluso el Toyota RAV4 y el Volkswagen Tiguan. Ya no es el “hermano menor” en la foto de familia SUV.

Diseño continuista, pero con músculo

No te preocupes: si eras fan de la silueta del CX-5, sigue siendo reconocible al instante. Mazda apuesta por una evolución lógica, siguiendo la estrategia “si funciona, no lo toques demasiado”. La parrilla crece, las líneas se estilizan y los detalles cromados ponen el toque premium. Es un SUV elegante, pero con ese puntito japonés que lo hace diferente.

Tecnología y confort: sube el nivel

La generación 2026 no solo es cuestión de centímetros. Dentro del habitáculo hay una revolución silenciosa: materiales más cuidados, equipamiento tecnológico actualizado y una clara obsesión por la comodidad. Mazda quiere que viajes a gusto, y eso se nota desde el primer kilómetro.

La gama ofrece cuatro acabados para todos los gustos, desde los más básicos (que de básicos solo tienen el nombre) hasta versiones equipadas a capricho. Todo ello con un enfoque muy orientado al confort de marcha, porque sí: aquí se viene a disfrutar del viaje, no solo a llegar al destino.

Motores: adiós diésel, hola hibridación ligera

En el apartado técnico hay cambios importantes. El CX-5 dice definitivamente adiós al diésel y también al cambio manual. Ahora toda la gama apuesta por motores gasolina apoyados por sistemas de hibridación ligera (Mild Hybrid), lo que le permite lucir orgulloso la codiciada etiqueta Eco.

Esta decisión lo pone en sintonía con las nuevas tendencias (y restricciones) del mercado español. Además, está disponible con tracción delantera o total, para que puedas elegir si prefieres moverte como un urbanita o atreverte con escapadas fuera del asfalto.

¿Básico más barato? Precios y posicionamiento

Mazda ha ajustado los precios para que incluso la versión de acceso resulte atractiva frente a sus principales rivales. El CX-5 básico se convierte en una opción muy competitiva para quienes buscan calidad y eficiencia sin hipotecarse hasta la jubilación. ¿Quieres más? Los acabados superiores elevan el nivel sin disparar la factura final.

En resumen: el Mazda CX-5 2026 es más grande, más cómodo y tecnológicamente mejor preparado. Ha dejado atrás motores y soluciones del pasado para abrazar la hibridación ligera y la etiqueta Eco. Y lo mejor: mantiene ese toque especial que siempre lo ha diferenciado entre los SUV generalistas.

¿Un SUV japonés que desafía a los grandes del segmento sin perder la cabeza en el precio? Sí, existe... y se llama Mazda CX-5 2026.