El Porsche Cayenne eléctrico presume de pantallas, 1.088 CV y un interior de ciencia ficción

Si alguna vez soñaste con conducir un SUV que combine el músculo de un superdeportivo con el interior de una película futurista, prepárate: el Porsche Cayenne eléctrico está a punto de hacerte replantear lo que significa viajar con estilo. Y sí, este Cayenne viene más cargado de tecnología que la mochila de un gamer profesional.
El habitáculo: donde las pantallas mandan
Que las pantallas invaden nuestros coches no es noticia. Pero Porsche, fiel a su espíritu de superación, ha decidido llevar la experiencia digital a otro nivel en el Cayenne eléctrico. Aquí no hablamos de una simple tablet incrustada en el salpicadero: hablamos de la mayor superficie de visualización jamás vista en un Porsche. Imagina la fusión de tres pantallas curvas, tan bien integradas que parecen el smartphone plegable más grande del planeta.
El conductor disfruta de un cuadro digital de 14,25 pulgadas, mientras que el pasajero delantero presume de una pantalla propia de 14,9 pulgadas (ideal para ganar todas las discusiones sobre la mejor ruta en el navegador). Pero la joya es el Flow Display: una pantalla OLED curva de 12,25 pulgadas que se apodera de la consola central y centraliza los mandos del climatizador. ¿Botones físicos? Los justos y necesarios, porque aquí todo va táctil y a golpe de dedo.
Y para los que temen dejar la huella dactilar en cada esquina, Porsche ha pensado en un reposamanos justo delante de la pantalla, perfecto para navegar los menús sin hacer el famoso “pulso de cirujano”. Incluso la salida central del aire se ha movido para dar paso a la mega-pantalla: prioridades claras.
Lujo eléctrico y detalles para sibaritas
Más allá del despliegue digital, este Cayenne cero emisiones tiene detalles dignos de un salón VIP en primera clase. Entre los extras más golosos encontramos reposabrazos calefactados no solo en las plazas delanteras, sino también detrás (porque todos merecemos manos calentitas en invierno). La consola central también presume de cubierta calefactada, ideal para esos días en los que parece que el Polo Norte se mudó a tu ciudad.
Y si eres amante de los cielos abiertos, atento: Porsche instala el techo panorámico de cristal más grande de toda su historia, dividido en nueve segmentos independientes que puedes hacer opacos o transparentes con solo pulsar un botón. Por supuesto, también se abre por delante como un techo solar clásico. Sí, el Cayenne eléctrico transforma cada viaje en una experiencia cinco estrellas.
Prestaciones que desafían la lógica
Para los fanáticos del rendimiento, aquí viene lo jugoso: el Cayenne eléctrico tope de gama promete más de 1.088 CV (sí, has leído bien) y unos bestiales 1.500 Nm de par motor. ¿El resultado? Acelera de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos y pasa de 0 a 200 km/h en menos de ocho segundos. Todo esto en un SUV que, seamos sinceros, pesa más que tu lista de deseos navideños.
La velocidad máxima supera los 250 km/h. Y si eres de los que disfrutan asustando al copiloto con una buena salida en semáforo, te encantará saber que incorpora Launch Control. Por si todo esto fuera poco, el Cayenne eléctrico equipa suspensión neumática y dirección trasera opcional para girar como un compacto: apenas 11,1 metros de radio de giro. Aparcarlo será casi tan fácil como manejar un utilitario (casi).
Tecnología a raudales… y autonomía para olvidarte del cargador
La batería del Cayenne eléctrico alcanza los 113 kWh de capacidad, con una densidad energética superior incluso al Taycan. Según ciclo WLTP, la autonomía supera los 600 km: podrás hacerte un Madrid-Barcelona sin parar a cargar… ¡y todavía sobrarán kilómetros para presumir por la ciudad!
¿Carga rápida? Por supuesto: con potencias de hasta 400 kW, pasarás del 10 al 80% en solo 15 minutos. Suficiente para tomarte un café rápido antes de volver a la carretera. Y si eres enemigo jurado del cable, Porsche prepara para 2026 una plataforma inalámbrica de carga a 11 kW: aparca encima y deja que la magia (eléctrica) haga el resto.
Frenos para domar a la bestia
Con tanta potencia bajo el pie derecho, frenar bien es tan importante como acelerar. El Cayenne eléctrico puede equipar frenos cerámicos con discos gigantescos: 440 mm delante y 410 mm detrás. Así podrás detener este titán con la misma confianza con la que aceleras.
El veredicto: lujo digital sin renunciar al ADN Porsche
Porsche ha creado con este Cayenne eléctrico algo más que un SUV potente y eficiente: ha construido una experiencia donde el diseño futurista, la tecnología sin concesiones y los detalles premium se dan la mano… o más bien, se deslizan sobre una pantalla curva.
El Cayenne eléctrico demuestra que el futuro ya está aquí y viene cargado de pantallas, caballos eléctricos y soluciones que harán las delicias tanto del techie empedernido como del petrolhead más recalcitrante. ¿Listo para ver cómo es realmente conducir en el siglo XXI? Ponte cómodo… o mejor aún: busca un reposabrazos calefactado y disfruta del viaje.