BMW se viene con los nuevos X5, X6 y X7 ¡A lo grande!

BMW se viene con los nuevos X5, X6 y X7 ¡A lo grande!
El BMW X7 pillado por Carscoops

En BMW ahora mismo están que no paran. Se les va la olla con lo que llaman la "Neue Klasse". Para el que no esté puesto, no, no es una clase de alemán. Es la línea que va a petarlo porque será el punto de inflexión del fabricante: menos humo, más electrones. El iX3 será el primero de la clase en enseñar músculos eléctricos. Se verá por primera vez en septiembre, en el Salón de Múnich, en modo “mírame y no me toques”.

Pero hoy la cosa va de los SUV XXL de la marca: X5, X6 y X7. Yo me centraba en turismos, hasta que un X5 me tocó probarlo hace un tiempo y casi me creo Schumacher, pero el bicho tampoco era fácil de meter en aparcamientos del centro. Ahora estos modelos se revolucionan.

El X5 pillado por los cracks de Carscoops

El X5 viene de camuflaje y no solo esconde chapa nueva

La generación actual del BMW X5 nos llegó en febrero de 2023. La quinta generación, bajo el código secreto G65, podría asomar el morro en verano de 2026. No huele a cambio radical por fuera, pero por dentro y debajo del capó... ahí sí hay morbo.

El X5 nuevo llevará plataforma CLAR, que ya suena a siglas de fibra óptica, pero realmente es una base evolucionada para integrar más motores y sistemas eléctricos, más allá de los desengaños de algunos eléctricos viejos de otras marcas. Ya te digo que el X5 actual ya admite hasta una versión a hidrógeno, el iX5 Hydrogen, que no he catado pero me pica la curiosidad, porque BMW puede ser pionera ahí.

En motores habrá para aburrirse: gasolina, diésel, híbrido enchufable y, atención, un eléctrico de verdad (iX5). Y sí, esa versión eléctrica mete más chicha de la que parece: se dice que tendrá la batería gorda, más densidad energética (20% más que lo que BMW tiene hoy), autonomía 30% mayor, carga también 30% más rápida y una pérdida de energía un 40% menor, o sea, menos watts tirados a la basura. Lo que necesita España si quiere conquistar a quienes sudan con un enchufe por miedo a quedarse tirados.

El X7... El tanque de la familia aguanta el tirón

Al X7 se le nota que está en lo alto de la gama. El último restyling fue en mayo de 2022, así que aún puede seguir con traje actual un tiempo más. Su relevo está previsto para 2027, pero aprovechará lo que el X5 estrene antes: esa base CLAR y el arsenal de motores. Ambos modelos salen de la fábrica en Spartanburg, Carolina del Sur (EEUU), un sitio donde los BMW casi parecen patinetes eléctricos de lo grandes que son los americanos.

Cuando conduje el X7 (sí, me dejaron dar un paseo por la M-40, tragando todos los radares posibles), flipé con el aislamiento y el empuje, sobre todo con el 40d, el diésel gordo de 340 cv. Sube cuestas como si llevase a los de Movistar colgados detrás y ni te enteras. Eso sí, el consumo era de grandes ligas: de los 7 litros oficiales, ni hablar; taca, taca, claro que si tienes pasta para él no te va a doler echarle cien pavos al depósito.

X6, el rebelde, ¿morirá o se reinventa?

Aquí hay debate. El X6, ese SUV-coupé al que siempre le han caído palos por el diseño (o lo amas o lo odias, como lo de la piña en la pizza), vende menos que el X5 en España: 341 unidades frente a 571 este 2025. Pero, ojo, el X6 sube en ventas un 2,1%, lo que no está mal para lo “nicho” que es el bicho.

Se habla de que si sigue adelante, copiará mecánicas eléctricas e híbridas al X5, pero no creen los expertos que el hidrógeno entre en esta película. Para España tiene su público entre quien busca postureo pero quiere cierta practicidad. Me tocó conducirlo por la costa y, sí, vuelves con tortícolis de tanto verte en los reflejos de los escaparates.

¿Dónde se cuece todo esto?

Todos estos “tanques” BMW los hace en Spartanburg, y están invirtiendo pasta loca en adaptar la fábrica, con mil millones de dólares solo para los cambios de estos SUV. No olvides que el X5, X6 y X7 son un filón, aunque aquí sean coches de nicho, porque en Alemania y USA esto es pan de cada día. Otro dato: también están montando una planta de baterías cerca, con 700 millones para tener a punto las celdas que moverán a los next-gen.

¿Y para España, qué?

En nuestro mercado estos BMW SUV son lujo total, pero cada vez más están apostando por enchufes y electrificación. Lo puedo decir: más de una vez me ha escrito alguien preguntando si merece la pena dejar un diésel de toda la vida por un PHEV premium. Para usos con recargas frecuentes y atascos, hoy sí empieza a encajar saltar al X5 híbrido enchufable. Y cuando el iX5 llegue con sus kilos de batería y autonomía real, no descarto ver más BMW rondando nuestras ciudades sin “retumbar” en las multas anticontaminación.

Motorizaciones futuras, lo que te vas a encontrar

No hay datos de toda la gama, así que nada de fliparse. Pero la cosa iría así:

  • Motores gasolina (seguramente 6 y 8 cilindros).
  • Diésel potentes y gastones, en la línea clásica BMW para quien hace kilómetros… o para quien sigue queriendo diésel pase lo que pase.
  • Híbridos enchufables con alcances eléctricos de verdad. El actual ya promete sobre 100 km eléctricos.
  • El esperado eléctrico iX5, que sube enteros en autonomía y eficiencia.
  • Y ojo, el hidrógeno que solo BMW se atreve a meter en coches “normales”, no solo prototipos.

BMW, el lío y el futuro SUV XXL

Esto va de marcas grandes que no se casan solo con electricidad, ni renuncian al motor de toda la vida. Si tienes un BMW X, ya sabes lo que es sentirse el rey del carril izquierdo y también el pánico cada vez que ves un parking subterráneo con las rampas justas. Quien lo prueba, sabe que el SUV alemán va camino de ser tan digital y avanzado como un smartphone, pero igual de fácil de usar, si tienes el presupuesto, claro.