Opel Corsa GSE 2026, el adiós más veloz con casi 300 CV y receta Perfo eCMP
El Corsa actual se despide por la puerta grande. Opel prepara un Corsa GSE eléctrico con casi 300 CV que hereda la base técnica Perfo eCMP ya vista en los Lancia Ypsilon HF y Peugeot e 208 GTI. Llegará en 2026 como canto del cisne de la sexta generación, una última vuelta de honor con sabor a utilitario deportivo cien por cien eléctrico.
Por qué este lanzamiento tiene todo el sentido
Stellantis está exprimendo una arquitectura común y eso abarata costes y acelera plazos. El Corsa comparte línea de montaje con Ypsilon y 208 en Figueruelas, y los tres modelos son casi calcados bajo la piel. Crear un Corsa GSE usando los mismos ingredientes es un movimiento de libro, poco riesgo y mucho impacto para cerrar ciclo con ruido del bueno, aunque sea eléctrico.
Lo que veremos por fuera
No será un Corsa Electric con pegatinas. Se esperan pasos de rueda más anchos y llantas específicas de 18 pulgadas que llenen bien el hueco, además de un paquete aerodinámico con spoiler delantero, difusor trasero y un alerón que remate la zaga. Colores exclusivos y detalles GSE pondrán la guinda para que, a simple vista, quede claro que no es el Corsa de tu vecina.
Ambiente GSE por dentro
El habitáculo seguirá la línea del Mokka GSE. Volante achatado para sentir más directo el eje delantero, asientos tipo semibaquet con reposacabezas integrados y tapicería en Alcantara que evita deslizamientos en apoyos fuertes. Pedales de aluminio y una interfaz de usuario personalizada con gráficos propios. El infoentretenimiento mostrará gestión de batería, cronos de aceleración y un indicador de fuerzas G, perfecto para medir ego y adherencia a partes iguales.
Mecánica y chasis con la mira en los hot hatch
La clave está en la Perfo eCMP. Esta evolución de la plataforma pequeña de Stellantis admite motores y electrónica de mayor rendimiento, además de una puesta a punto de suspensión y frenos a la altura. Con casi 300 CV, el Corsa GSE jugará en la liga de los urbanos picantes, esos que te alegran un puerto y no se arrugan en circuito corto. El objetivo no es solo correr en línea recta, también aguantar ritmos altos sin fatiga térmica y con un pedal de freno que inspire confianza.
Qué cabe esperar del sistema eléctrico
Más potencia exige gestión fina. Habrá modos de conducción con mapas de entrega distintos y una refrigeración de batería optimizada para sesiones intensas. La telemetría a bordo permitirá entender cómo fluye la energía y dónde se pierde, útil para mejorar tiempos y también para aprender a no tirar autonomía por la ventana. Las recuperaciones serán configurables para afinar el apoyo en entrada de curva y ahorrar pastilla cuando toca paseo.
Producción, calendario y posicionamiento
Lanzamiento previsto para 2026, producción en Figueruelas en la misma línea que Ypsilon y 208, lo que facilita volúmenes ajustados y calidad homogénea. Será el adiós del Corsa de sexta generación, un broche que además coloca a Opel en la foto de los eléctricos prestacionales asequibles. Por precio debería situarse por encima del Corsa Electric convencional y alineado con sus primos de plataforma con enfoque deportivo.
Competidores y encaje en el mercado
El Corsa GSE convivirá con propuestas del mismo grupo, como Abarth 600e, Alfa Romeo Junior Elettrica Veloce, Lancia Ypsilon HF y Peugeot e 208 GTI. Fuera de Stellantis el tiro apunta a los urbanos eléctricos de corte deportivo que empiezan a asomar. Cuanto más amplio sea el ecosistema, más interesante será la pelea en chasis, software y feeling, que es donde se ganan los fans.
Un Corsa eléctrico con mala leche, estética con músculo y una puesta a punto de verdad. Si te gustan los utilitarios que te arrancan una sonrisa cada vez que giras el volante, quizá te convenga marcar 2026 en el calendario y dejar algo de hueco en el garaje.