Mercedes y los 1.000 km: el salseo eléctrico está aquí

Mercedes se ha tirado a la piscina, pero no a una normal. Ha saltado a una de esas con olas grandes, trampolín y un montón de mirones. Hablo de coches eléctricos, sí. Y sí, están probando uno basado en el EQS que dice que hace más de 1.000 km sin despeinarse. Si eres de los que aún mira raro a los que llevan un coche a pilas… ve actualizando el chip.
Esto no es un coche de feria
Te suelta Mercedes que están probando ya el primer eléctrico con batería de electrolito sólido en las carreteras de Europa. O sea, no es un render simpático ni una promesa vacía. Los tíos han cogido un EQS, le han puesto una batería nueva, y se han salido a rodar con él como si fueran a pillar el tren en Chamartín en hora punta.
El rollo de la batería milagrosa
El truco aquí no es magia, aunque lo parezca. La batería de electrolito sólido es el santo grial para los eléctricos. Más densa, menos riesgos y, sobre todo, autonomía para aburrir (o para llegarte de Vigo a Almería sin mirar el marcador). Mercedes dice que va a llegar a 450 Wh/kg a nivel de celda. Para que no te líes: los Tesla con sus celdas 4680 (si, las que puso hasta Elon en la mesilla de noche) están entre 270-290 Wh/kg. Esto es una subida de nivel importante. Hablamos de hasta un 25% más de autonomía respecto a una batería clásica del mismo tamaño y peso.
Mi colega el Mercedes EQE 350+ sale en la foto. Ahora marca 660 km WLTP (en modo abuelita). La teoría dice que pasaría a 825 km. Y si te mola el Tesla Model 3 Long Range RWD, esos 702 km se transforman en 877 km. Que sí, que después la vida real es otra historia y ya sabemos que si pones la calefacción o pegas acelerón, eso baja. Pero la mejora técnica es impresionante.
Formula 1, pero para la calle
Todo este avance es por la gente de AMG High Performance Powertrains (los que hacen sudar a Verstappen y compañía). Tecnología de F1 pasada a coche de calle. El desarrollo lo han hecho en colaboración con Factorial, una empresa que lleva años dándole caña a esto del electrolito sólido.
El proceso es sencillo sólo para ingenieros locos: banco de pruebas en Stuttgart, integración en el Mercedes EQS y luego a pillar kilómetros reales por Europa. Así se prueba lo serio. Me mola porque estos test no son sólo promesas, son datos reales y kilómetros de carretera aburrida y de la otra también.
Más autonomía, menos peso y aerodinámica de nave
El Mercedes EQS ya era el eléctrico premium para padres que quieren postureo y viajes sin drama de recarga. Por ahora, el EQS 450+ tiene una batería de 118 kWh y te puede marcar en el WLTP más de 800 km. Si lo equipan con la batería de electrolito sólido, subes por encima de los 1.000 km. Olvídate del “range anxiety”. Si tienes que parar es para mear o pillar un pincho de tortilla, no para buscar enchufe.
Aquí entra todo: más densidad energética, menos peso, y encima refrigeración pasiva. Así no arrastras kilos de un sistema inútil. La aerodinámica es de otro planeta. Yo me subí a un EQS para un viaje entre Madrid y Valencia. Me sentí como llevando una nave. Silencio total, ni rodadura ni viento. Con estas mejoras, será aún más absurdo lo lejos que puede llegar.
Carga rápida: dame 5 minutos y me vuelvo a ir
No es solo ir lejos, es cargar rápido. La batería de electrolito sólido puede cargar a tasas superiores a 5C. Traducido a nuestro idioma: un EQS puede cargar por encima de 500 kW si el cargador lo permite. Bajando al terreno del bar de carretera, serían 300 km de autonomía recuperados en 5 minutos. Aquí en España, esto te da para cruzar Castilla sin sudar. Ahora mismo la infraestructura no permite esas potencias por todas partes, pero poco a poco se va ampliando la red de carga ultrarrápida, sobre todo en los corredores de la península. Dentro de unos años, irá mucho mejor.
Lo importante: supera a los diésel en libertad de movimiento y eso mete presión a todo el sector, sobre todo aquí en España, donde la autonomía sigue siendo la gran excusa para no pasarse al coche eléctrico.
Otros eléctricos se ponen las pilas (literalmente)
No sólo Mercedes se va a beneficiar. El ejemplo del Renault 5 eléctrico lo ilustra muy bien para la gente urbanita: de 410 km WLTP a 512 km con baterías sólidas. Y eso lo ves en un coche del segmento B, o sea, pequeño, práctico y pensado aquí para ciudad o escapadas de finde. La mejora no es solo para tocones de las berlinas.
La clave va a ser el tiempo que tarden en industrializar esto. Mercedes no da una fecha firme, pero ya están probando y validando.
Marcas como Mercedes empujan y las demás van a tener que ponerse a la altura rápido. Tesla lleva el ritmo, pero aquí en el mercado español la competencia sube el listón cada mes que pasa.
Todavía queda mucho para ver estos EQS de 1.000 km en los concesionarios de aquí, pero ver coches rodando en pruebas por Europa, con matrícula visible, eso es otra historia. Aquí ya no se habla de futuro, sino de presente en fase beta.
Y mientras tanto, los de combustión cada vez más arrinconados. El eléctrico ya no es el rarito. Va camino de ponerse chulo.