Markus Haupt, CEO de SEAT y CUPRA, nos cuenta por qué SEAT no tendrá coches eléctricos

Markus Haupt, CEO de SEAT y CUPRA, nos cuenta por qué SEAT no tendrá coches eléctricos
Markus Haupt, el actual CEO interino de SEAT y Cupra

El coche eléctrico parece el destino inevitable para cualquier marca que aspire a sobrevivir en la selva automovilística europea. Sin embargo, hay excepciones que sorprenden hasta al más fanático de la movilidad sostenible. SEAT, la firma española de toda la vida, ha dejado bien claro que su salto al coche eléctrico no está ni cerca ni barato. ¿Por qué? Te lo cuento con todo lujo de detalles y sin pelos en la lengua.

SEAT y el coche eléctrico: una ecuación poco rentable

Markus Haupt, el actual CEO interino de SEAT y Cupra, ha sido transparente hasta rozar lo brutal. Según sus propias palabras, fabricar un SEAT eléctrico hoy en día no es viable económicamente. Los costes de desarrollo, producción y comercialización elevarían el precio final a niveles que harían llorar a cualquier comprador que busque un utilitario accesible.

Mientras el Grupo Volkswagen presume de ofensiva eléctrica en ferias como el IAA Mobility de Múnich, SEAT se queda fuera del reparto de enchufes. No es porque no quieran, sino porque los números simplemente no salen. Haupt lo resume con ironía alemana: hacer un SEAT eléctrico sería lógico, sí, pero imposible de rentabilizar.

Cupra toma el testigo y se lleva la gloria eléctrica

Aquí viene el giro de guion. Aunque SEAT se baja del tren eléctrico, su hermana Cupra pisa el acelerador y apunta a liderar la nueva generación de coches urbanos a baterías. Ejemplo claro: el Cupra Raval, ese urbanita eléctrico fabricado en España que llegará en 2026 y que ya causa revuelo aunque todavía va camuflado.

¿Por qué Cupra y no SEAT? La respuesta es tan sencilla como incómoda: Cupra es más rentable. Y si hay que apostar fuerte en tiempos inciertos, mejor hacerlo con la marca que deja más margen por coche vendido. De hecho, Haupt reconoce que fue este el principal motivo para crear una nueva marca. SEAT sigue siendo la firma del pueblo, pero Cupra es la que paga las facturas eléctricas.

El cliente joven quiere un eléctrico barato… pero tocará esperar

Los números no engañan: el cliente típico de SEAT es el más joven del Grupo Volkswagen, con una media de 43 años (sí, eso es joven en el mundo del motor). Muchos de estos conductores piden a gritos un eléctrico compacto y asequible. La respuesta del grupo es clara: paciencia.

Cupra Raval será la alternativa deseada para quienes buscan un urbano eléctrico con toques deportivos y tecnología moderna. Pero ojo, porque no estará solo: pronto llegarán también el Skoda Epiq, el Volkswagen ID. Polo y el ID. Cross Concept, todos fabricados en España bajo la batuta tecnológica de SEAT… aunque ninguno llevará su logo.

¿Qué futuro le espera a SEAT en la era eléctrica?

La situación de SEAT roza lo surrealista. No tendrá modelos eléctricos propios a corto plazo, pero será clave en el desarrollo y producción de los urbanos eléctricos para todo el Grupo Volkswagen. Es decir, será el cerebro y las manos, pero no la cara visible en los concesionarios eléctricos.

Mientras tanto, seguimos esperando la llegada del nuevo CEO definitivo tras la salida de Wayne Griffiths. Puede que cuando llegue alguien con ideas frescas y un Excel menos apretado, veamos un SEAT eléctrico asequible. De momento, la respuesta es tan eléctrica como fría: no es viable.

¿Moraleja? En la carrera hacia el coche eléctrico, a veces hay que saber cuándo acelerar… y cuándo dejar que otro pase primero por la meta.