BYD adelanta a Hyundai y ya es cuarta mundial mientras el mercado sube 3,8% con China al mando

BYD adelanta a Hyundai y ya es cuarta mundial mientras el mercado sube 3,8% con China al mando
BYD ya es la cuarta marca más vendida del planeta

El mercado del automóvil ha cambiado de marcha en los seis primeros meses de 2025. Entre enero y junio se matricularon 45,2 millones de coches en todo el mundo, un 3,8% más que en el mismo periodo de 2024. No es un sprint, pero sí un ritmo constante que devuelve aire a un sector exigente con costes, regulación y oferta.

El impulso no ha venido de donde muchos esperaban. Los fabricantes chinos han tirado del carro con exportaciones que han compensado los baches de varias marcas tradicionales. Europa, Latinoamérica, Oriente Medio y parte de Asia han sido sus mejores carreteras.

Toyota, sólida como un bloque

En la foto de familia, Toyota vuelve a liderar la clasificación mundial que incluye también vehículos industriales pesados, con 4,73 millones de unidades. Traducido a calle: uno de cada diez coches nuevos luce el emblema de la casa japonesa.

La cifra supera los 4,48 millones del primer semestre de 2024. La receta funciona gracias a una mezcla eficaz de híbridos eficientes, producción disciplinada y una red comercial que rara vez pierde el norte. No suena épico, suena a trabajo bien hecho.

BYD adelanta a Hyundai y se cuela en el top cuatro

La noticia del semestre está en la zona noble del ranking. BYD supera a Hyundai y se coloca como cuarta marca más vendida del planeta. No es casualidad. La marca china ha juntado precio afinado, integración vertical de baterías y una gama que cubre desde urbanos hasta grandes SUV y comerciales, con protagonismo de eléctricos e híbridos enchufables.

Hyundai mantiene músculo tecnológico y una imagen fuerte, pero la rotación de modelos, la disponibilidad en algunos mercados y un entorno de precios más agresivo han abierto la puerta al adelantamiento. El auge exportador chino ha hecho el resto.

China pisa el acelerador

Detrás del crecimiento del 3,8% hay una ecuación clara. Costes contenidos, escalado rápido de plataformas eléctricas, acuerdos logísticos y una ofensiva comercial sin complejos. Las marcas chinas han encontrado hueco donde otros levantaban el pie.

La consecuencia es doble. Más competencia en precio y más variedad de producto. Desde compactos eléctricos de acceso a berlinas y SUV con autonomías ya muy respetables. El consumidor tiene más donde elegir y el concesionario se ve obligado a afinar la oferta.

Qué cambia para el comprador

  • Más eléctricos y enchufables a precios que antes parecían ciencia ficción.
  • Descuentos y financiación más agresivos para defender cuota.
  • Mejora rápida en software y ayudas a la conducción, terreno donde la batalla está abierta.
  • Plazos de entrega más saneados en muchas categorías, aunque los picos de demanda siguen mandando.

Señales a vigilar en la segunda mitad del año

La clasificación puede moverse con el tipo de cambio, nuevas normativas, aranceles, la guerra de precios y la llegada de modelos clave. La logística global está más estable que hace un año, pero no da para siestas. Un lanzamiento acertado o un ajuste de precios puede recolocar más de un logo en la parrilla.

Nota sobre el alcance de los datos

La tabla que ordena a los fabricantes incluye vehículos industriales pesados, además de turismos y comerciales ligeros. Las cifras combinan datos oficiales de marcas y estimaciones sectoriales, por lo que pueden diferir de listados que excluyen parte de esos segmentos.

En resumen, Toyota mantiene el volante con firmeza, BYD gana inercia y el mercado global vuelve a crecer con China al mando del acelerador. Lo interesante no es solo quién va delante, sino lo rápido que cambian los retrovisores.