BMW M Performance se acerca a los 400 CV, la deportividad sube de nivel

BMW M Performance se acerca a los 400 CV, la deportividad sube de nivel

BMW ha decidido apretar el acelerador (¿qué esperabas, que lo levantara?) y ahora sus versiones M Performance están más cerca de los 400 caballos que nunca. ¿El resultado? Deportividad a raudales, tecnología fresca… y sí, también una subida de precio que no va a pasar desapercibida en los concesionarios.

El escalón intermedio que ya no es tan intermedio

La marca bávara lleva años mimando a los conductores con ganas de emociones fuertes, pero sin querer meterse en el “territorio salvaje” de los M puros. Aquí es donde entran los modelos M Performance, esos coches que prometen sonrisas y alguna que otra sorpresa al pisar el gas, pero sin exigirte un máster en pilotaje.

Hasta ahora, este escalón era la opción lógica para quienes querían algo más picante que un BMW normal pero sin llegar a la brutalidad de un M. Sin embargo, con las novedades anunciadas para finales de 2025, ese punto medio se vuelve cada vez más borroso. El M440i Cabrio, por ejemplo, ya coquetea con cifras reservadas antes solo para superdeportivos.

Más músculo gracias a la microhibridación

La clave del salto está bajo el capó. BMW ha dotado a sus motores de seis cilindros en línea y 3.0 litros TwinPower Turbo con un sistema MHEV (mild hybrid) de 48 voltios acoplado a la caja automática. Este pequeño empujón eléctrico suma 18 CV extra a la fiesta, dejando la potencia total en unos nada despreciables 392 CV.

No es solo una cuestión de números. Esta tecnología mejora la respuesta inmediata y hace que el coche sea aún más ágil al acelerar desde parado. Eso sí, si esperabas que esta “electrificación” fuera la excusa para bajar precios… más bien todo lo contrario.

Suben los caballos… y la factura

Aquí llega la cara B de la moneda. Más potencia y tecnología vienen acompañados de incrementos en los precios de toda la gama M40i: desde el M240i hasta los M340i Sedán y Touring, pasando por los diferentes formatos del M440i (Coupé, Cabrio y Gran Coupé). La exclusividad se paga, y parece que BMW quiere dejar claro quién manda en el segmento premium deportivo.

¿Es mucho pedir por un producto tan afinado? Los entusiastas dirán que no hay color; después de todo, disfrutar de casi 400 CV con la legendaria puesta a punto bávara y sin renunciar al confort diario es un capricho difícil de igualar.

¿Qué significa esto para el mercado?

La ofensiva de BMW obliga al resto de marcas a ponerse las pilas (literalmente). Mientras algunos rivales siguen apostando por híbridos suaves como carta de presentación ecológica, los alemanes lo combinan con un extra de carácter deportivo. Un movimiento inteligente para mantener contentos tanto a puristas como a los que buscan algo “verde”, aunque sea de boquilla.

Eso sí, si estabas pensando en dar el salto a un M Performance, tal vez sea el momento de revisar el saldo en la cuenta corriente o empezar a mirar el sofá con otros ojos… nunca se sabe dónde puede haber unos euros sueltos.

¿Merecen la pena esos 400CV?

Las nuevas versiones M Performance no solo rozan los 400 CV, sino que también se acercan peligrosamente al territorio exclusivo de sus hermanos mayores. ¿El precio? Más alto, por supuesto, pero también lo es el nivel de sensaciones y tecnología. Si buscas emoción diaria sin tener que irte a Nürburgring todos los domingos, estos BMW pueden ser tu billete dorado. Al menos hasta que el próximo restyling ponga el listón (y la factura) todavía más arriba.