Avalancha china, o cómo pasar de AliExpress a la UE a base de enchufe y morro

Avalancha china, o cómo pasar de AliExpress a la UE a base de enchufe y morro

Vaya movida la que se ha destapado en China con los coches eléctricos. Resulta que los fabricantes de allí, los que están invadiendo nuestras calles españolas con eléctricos baratos, no solo han tenido ayuda del gobierno chino… es que algunos se han pasado el “juego” haciendo trampas para pillar más pasta pública de la que tocaba. Lo típico: te ponen la alfombra roja, pero tú quieres la alfombra, los muebles y el apartamento de la abuela. Pues eso ha pasado.

Guerra, subsidios y la UE subiendo los aranceles

En España cada vez vemos más marcas de coches raras: BYD, Omoda, Jaecoo, Chery… Si abres el buscador de coches, han colonizado las webs. ¿Por qué llegan tan fuerte? Los chinos están a muerte con el eléctrico. Por eso el Gobierno chino montó un mega programa de subvenciones: si hacías coches eléctricos o híbridos, pasta gansa para ti. Llegaron a dar hasta 60.000 yuanes (unos 7.100 euros) por coche fabricado. Calcula, multiplica y ríete tú de cualquier plan MOVES patrio.

Aquí en la UE lo han visto venir y han puesto aranceles a los coches chinos eléctricos para intentar frenar la estampida. No les hace ni pizca de gracia que, con precios mucho más bajos, te planten un BYD delante de los narices a la mitad de precio que un eléctrico europeo.

Chery y BYD jugando al Monopoly nivel jefe final

La auditoría china, esa que normalmente acaban metiendo debajo de la alfombra, ha salido a la calle. Y no es poca cosa: 864 millones de yuanes “regalados” a coches que NO cumplían condiciones para la pasta. Oja que alguno haya colado el papel del primo con el sello de la fábrica. Entre las señaladas sale Chery, la madre de Omoda y Jaecoo, que le deben al Estado más de 28 millones de euros por 8.860 coches eléctricos e híbridos fabricados entre 2016 y 2020. Ahí es nada. Luego se quejan de la picaresca española…

Otros como BYD, la que ves en cada centro comercial, no se quedan atrás. Pillaron 143 millones de yuanes (más de 17M de euros) para solo 4.900 coches. Si divides, la ayuda por coche es de escándalo. Y, por cierto, nadie sabe si lo han devuelto o si se han hecho los suecos, como cuando te llega una multa y “se traspapela”.

BYD en España, los eléctricos baratos tienen truco

BYD no es cualquier cosa. El Atto 3 está petando los concesionarios españoles entre los que buscan un SUV eléctrico y les sudan las filias patrióticas. El BYD Atto 3 lleva batería Blade de litio hierro fosfato: 60,5 kWh netos, ofrece unos 420 km WLTP y carga en corriente continua hasta 88 kW. En ciudad, el motor de 204 CV empuja bien, pero el peso (1.750 kg fácil) le resta chispa en tramos revirados. Personalmente, entre rotondas y tráfico, es tan cómodo como un sofá del IKEA, pero cuando le pides alegría en autopista, la autonomía baja más rápido de lo que dejas de confiar en la afición del fútbol chino.

En la competencia europea directa, a igualdad de autonomía y equipamiento, los BYD suelen pegar un hachazo al precio. Y claro, todo suma si de base tienes ayuda pública... o más de la que deberías. Lo flipante es que este ahorro se traduce en precio final. Es una parte de cómo pueden darte tanto por tan poco.

Chery saca músculo, pero también trampas

La otra protagonista es Chery, marca de la que, si preguntas a tu tía, ni le suena. Pero está detrás de Omoda y Jaecoo. El Omoda 5 EV, que viene pisando fuerte, monta una batería de 61 kWh y lanza 204 CV eléctricos a las ruedas delanteras, igual que el Atto 3. Homologa 450 km WLTP, cifras que, siendo irónico, en autovía a 120 ni de coña. Lleva sistema de infoentretenimiento chulo y equipamiento de los que a los europeos les cuesta tiempo digerir. El precio está reventando la lista para quien busca coche nuevo en 2025 en España.

La trampa en Chery ha sido ir a toda pastilla pidiendo ayudas para coches “green” que luego, según los chinos, ni cumplen requisitos de eficiencia ni de fabricación local. Un poco como pedir beca de comedor y luego comer en el Burger escondido.

¿Qué pasa ahora con los eléctricos chinos en España?

El Gobierno chino ha pegado un toque, porque la guerra de precios se estaba yendo de madre. Algunas marcas hasta hacían trampas más originales: entregaban coches a los concesionarios y los registraban como “usados sin kilómetros” para colarlas como ventas hechas. En el típico Excel de ventas eso luce guay, pero es el timo del soldado Desconocido versión coche. Aquí en España, si te compras uno de estos coches y luego el precio baja una barbaridad en un mes, ya sabes por qué. Esta presión por vender a saco y pelear precios hace que el coche, aunque esté bien, salga disparado en la depreciación más rápido que pierde valor un móvil chino.

¿Y si buscas un chino eléctrico barato? Ojito y compara

Si estás cazando coche eléctrico, los chinos (y algunos coreanos) te venden una equipación de escándalo por la mitad de lo que piden otras marcas. La autonomía homologada siempre es optimista. El equipamiento de serie es muy bestia: techo panorámico, sensores, pantallas enormes, asientos calefactados... Pero, revisa bien calidades. Algunos detalles cantan a plástico más que coche de los coches de autoescuela de hace 10 años.

Y, muy importante para vivir tranquilo en España: la garantía (BYD da 6 años o 150.000 km en España). Chery, por su lado, promete 7 años. Eso sí, a ver cómo responden si algo se tuerce, porque el despliegue de talleres oficiales todavía es tímido. Diría que tengo más cerca una cafetería Starbucks que un taller de Omoda en mi ciudad.

Crecer con pasta pública es fácil. Hacerlo cumpliendo las reglas, más complicado. Yo me lo sigo pasando bien probando eléctricos chinos a precio de Dacia, pero con la ceja arqueada cuando veo tanta ayuda y tanto precio tirado.