La llegada de Voyah: el lobo chino que ruge
¡Atención, colegas del motor! Llega a España una marca china que quiere ponérnoslo difícil. Estoy hablando de Voyah. Coches eléctricos, elegantes y con ganas de comerse las carreteras ibéricas.
Voyah Free: Libertad a tope
El primer paso serio de Voyah se llama Free. Un SUV eléctrico que no deja indiferente a nadie. Hablamos de un bicharraco que impone respeto. Pero, ojo, no va de sobrado. Sus 490 caballos bajo el capó no son un cuento chino. Es pura dinamita lista para brillar en cualquier carretera.
Motor dual que tira al unísono. Hasta 500 km de autonomía, si vas con calma. El diseño me sorprendió. No parece sacado de un almacén robótico, sino de una mente maestra. Interior de lujo. Pantallas que parecen arrancadas de un videojuego. Una locura llevarlo por la ciudad. La gente se queda mirando, y eso me gusta. El sonido cuando lo arrancas es casi futurista. ¡Una experiencia total!
Voyah Dreamer: Pisa fuerte
El Dreamer es otro rollo. Híbrido enchufable, pero no típico. Te planta más de 800 km con una sola carga cuando combinas el motor térmico con el eléctrico. No está mal para un minivan que se mueve como un bailarín en una discoteca.
Sensaciones al volante sólidas. Es grande y se nota, pero responde como un puro atleta. Asientos traseros que parecen butacas de un cine lujoso. En una escapadilla, lo llevé hasta la sierra. Ni una queja. Espacio infinito y una sensación de paz que viene de ese interior silencioso. ¡Hay que probarlo!
Tecnologías que flipas
Voyah no juega con la tecnología. Ojo a su sistema ADAS avanzado. Conducción prácticamente autónoma. Control de crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril y más cosas chulas. Lo bueno, no te hace sentir que el coche te quita el protagonismo. Modo piloto, pero tú marcas el ritmo.
Y el tema de las actualizaciones OTA (Over-the-Air). Sin ir al taller para mejorar el sistema. ¡Qué gozada!
Precios que no asustan
Voyah no vino a hacerte sangrar la cartera. Precios competitivos. El Free ronda los 49.900 euros. El Dreamer, algo más, pero no se te va de las manos. Muchos dirán que es una ganga por todo lo que ofrecen. Otros dudarán de la fiabilidad china. No sé, yo los probé y son pura dinamita.
En resumen
Cuidado con Voyah. Han llegado con ganas de sacudir el panorama automotriz. Si buscas un eléctrico con un look diferente, algún lujo y sin empeñar un riñón, échales un vistazo. Los tiempos están cambiando y Voyah está listo para dar pelea.
Eso es todo, amigos. ¡Nos vemos en las carreteras con el rugido del motor y la pasión que nos mueve! Al final en esto del motor lo importante es disfrutar, siendo fiables y con estilo. ¡Nos vemos con más charlas sobre el asfalto!