Dacia: El secreto mejor guardado
¿Quién dice que necesitas un pastizal para un coche decente? Dacia es la Lupita Nyong'o del mundo automotor. Una revelación. En la última década, se han convertido en el plan B que nadie pega con chicles como improvisación.
Dacia Sandero: La revolución en cuatro ruedas
El Sandero es el Messi de Dacia. Precios de risa, rendimiento de galáctico. Un motor 1.0 TCe de 90 CV. No es el turbo de la Fórmula 1, pero te lleva de A a B tranquilamente. Más espacio que el salón de tu abuela. Envidia del vecino.
La app "Dacia Media Nav" es simple, funcional, lo que necesitamos. Tiene conectividad con Apple CarPlay y Android Auto. Un lujo por el precio de un mecadillo.
Dacia Duster: El SUV para guerreros urbanos
¿Necesitas algo todoterreno? Duster al rescate. Este SUV tiene una tracción 4x4 para cuando las calles están mojadas. Motor diésel 1.5 Blue dCi de 115 CV. Bajo consumo, menos visitas a la gasolinera. Ideal para las montañas o aparcar en el centro. En caminos de tierra, te hace sentir como Indiana Jones.
Una vez lo llevé por un camino de montaña. Resistente como un viejo cubo de playa. Ni un rasguño. El Duster se aferra al suelo mejor que Spiderman a las paredes.
Lodgy: La furgoneta para la familia numerosa
¿Familia extensa? Lodgy te cubre. Es sencillo, práctico y tiene siete plazas. Casi un autobús escolar. Motor de 100 CV, suficiente para que los niños no se aburran en la parte trasera.
La tecnología es básica, pero funciona. Tablet operativa, navegación lo suficientemente útil para no perderte en medio del campo.
Logan: Aburrido solo de nombre
El Logan es el coche del asalariado joven. Espacioso, básico, pero honesto. Excelente relación calidad-precio. Motor 1.0 de 75 CV. Suficiente para las escapadas de fin de semana.
Las suspensiones son modestas, pero no esperas un Mercedes. Ideal para los que buscan coche sin romper la hucha.
Spring: El eléctrico para los valientes
El Spring es la apuesta eco. El robotejo de la movida eléctrica. Batería de 27,4 kWh con autonomía de hasta 230 km. Perfecto para ciudad. Fácil de aparcar, pequeño pero cumplidor.
No es un Tesla, claro, pero te calzas 421 litros en el maletero. Súper práctico. Y que no hablen de su diseño, compite cabeza a cabeza con los pequeños urbanos más modernos.
Mis impresiones a tope
Conduje un Duster durante un verano entero. Pura aventura, pura vida. Desde asfalto liso hasta caminos de cabras. No hay quien lo pare. Como un colega confiable siempre al pie del cañón.
En resumen, la gente mira Dacia y se le arruga la nariz. Les falta probarlo. Sorpresa positiva. Son coches para vivir la vida sin preocupaciones excesivas. Los he probado, en ciudad y campo, y lo mejor es que no te dejan tirado. Para eso, mejor llamas a tu cuñado, pero no a Dacia.